La Catedral de Sevilla y la Giralda son símbolos de la capital andaluza y patrimonios de la humanidad.
Aquí te voy a contar lo que necesitás saber antes de visitar dos de las joyas de esta ciudad.
La Catedral
Localizada en el corazón de la ciudad de Sevilla, entre el barrio de Santa Cruz y el Rio Guadalquivir, la Catedral de Santa María de la sede más popularmente conocida como Catedral de Sevilla, es el templo gótico más grande del mundo y el tercero de la cristiandad después de la Basílica de San Pedro en el Vaticano y de la Catedral de San Pablo en Londres.
Se comenzó a edificar en 1401 encima de la antigua Mezquita Aljama o Mezquita Mayor, destruida por los cristianos al reconquistar la ciudad. Desde entonces fue tomando la forma que hoy tiene, mezclando diferentes estilos arquitectónicos: románico, renacentista, mozárabe, aunque predomina su estilo Gótico.
Está compuesta por 5 naves y 25 capillas que contienen obras de algunos de los más célebres pintores españoles. También se exhiben los restos de Cristóbal Colón, contenidos en un gran ataúd sostenido por cuatro figuras que representan los cuatro reinos históricos españoles: Castilla, León, Aragón y Navarra.
La Giralda
La torre de la Catedral de Sevilla, la famosa Giralda, era el antiguo minarete de la mezquita, que después de la reconquista de la ciudad por parte de los cristianos fue convertida en campanario rematado por la escultura que representa el triunfo de la fe, que hoy se conoce popularmente como el Giraldillo.
Con sus 101 metros totales de altura, la Giralda fue durante mucho tiempo la edificación más alta de Europa. Esa altura hace que desde allí tengas las mejores vistas y que la torre sea visible desde cualquier punto de la ciudad. Una buena referencia por si en algún momento te perdés y no sabés bien para donde tenés que ir.
El interior de la Giralda es muy sencillo, sin grandes adornos. La subida al campanario se hace a través de 35 rampas suficientemente anchas para permitir el paso de un caballo. Esta medida se tomó para facilitar la llegada a la cúspide del imán de la mezquita. El imán era el encargado de llamar a la oración durante el período árabe.
Horarios de visita
Lunes: de 11:00 a 15:30
De martes a sábado: de 11:00 a 17:00
Domingo: de 14:30 a 18:00
Estos horarios pueden verse modificados debido a la celebración de actos de culto y actividades culturales.
